Ella descubrió el escalofriante secreto de su padre y él le roció ácido en la cara. Mira qué era

Cuando Khushboo Devi descubrió lo que su padre estuvo haciendo durante toda su vida tomó la decisión de enfrentarlo y decirle todo lo que sabía.

La mujer de solo 20 años descubrió que su padre era un traficante de niñas y adolescentes.

Días después de haber encarado a su padre, mientras Khushboo se encontraba durmiendo al lado de su esposo y su hija de solo 3 años, escucharon un fuerte ruido, su padre rompió la puerta de su hogar, intentaba matar a su propia hija. 

No lo logró, pero si pudo arrojarle ácido en el cuerpo. Afortunadamente su pareja y su hija no sufrieron lesiones de gravedad. 

Sin embargo, su rostro y la mitad de su cuerpo resultaron severamente dañados por el potente químico.

Ahora su objetivo es acabar de una vez por todas con el tráfico de niñas y hacer que su padre pague por todo el daño que ha hecho. 

“Mi padre me arrojó ácido porque sé todo sobre él. Sabe perfectamente que si hablo va a estar para toda la vida encerrado. Sé todos sus secretos: sus matrimonios, la compra de niñas y su posterior venta. También conozco sobre sus maltratos y sus abusos”, señaló Devi.

“Él pensó que si me mataba sus secretos estarían a salvo, pero yo no voy a descansar hasta que se haga justicia”. 

“Durante muchos años vi cómo maltrataba a mi madre y a cientos de niñas que pasaban por mi casa y yo no entendía el porqué: Mi madre vivió una vida muy dura junto a mi padre. Una vez la golpeó tan fuerte que le rompió el tímpano y perdió la capacidad de escuchar”. 

“Me dijo que mi mamá no sabía limpiar, ni lavar ropa y por eso llevaba a niñas a la casa, con la intención de que realizaran esas tareas. Pensó que yo nunca me daría cuenta”. 

“No puedo creer que me odie tanto. Nunca pensé que iba a tratar de matarme. Todavía estoy en estado de shock. Me da escalofríos cada vez que lo pienso. Espero que Dios le de un duro castigo”.

“Trató muchas veces de venderme, pero Dios me salvó”. 

Cuando Devi apenas contaba con 12 años trabajaba en una fábrica de ladrillos y sus compañeros le dijeron que se escapara, ya que su padre planeaba venderla ese mismo día. 

Años después, cuando tenía 14 años, su padre la ofreció a quien hoy en día es su esposo, porque tenía una deuda con él.

“Al principio me opuse. Pero mi madre me dijo que Vinod era un buen hombre. Por suerte estoy felizmente casada con él”. 

“Voy a hacer todo para que no salga de la cárcel. Me temo que va a enviar a alguien a matarme, pero voy a luchar hasta mi último aliento”. 

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